La Basura que comemos. Transgénicos y comida chatarra. por Eduardo del Río. |
Qué tal! Apartándome un poco del tema
de la administración (hasta cierto punto), busqué entradas de blogs de mis
compañeros de clase y de otros compañeros de la universidad, honestamente me
tomó un tiempo decidir cuál escoger para platicarles en mi entrada, pero me
interesó el tema de Tania del grupo 3, Cocinando una empresa, adjunto su link: http://cocinandounaempresa.blogspot.mx/2012/10/la-basura-que-comemos-rius-2012.html.
El motivo por el que me interesó fue por abordar el tema de “la basura que
comemos” donde menciona haber leído “La Basura que comemos: Transgénicos y
comida chatarra” del Autor Eduardo del Río.
Hace una reflexión de la manera en
que estamos comiendo últimamente, por las ocupaciones y el poco tiempo que
decimos tener para no cocinar algo natural y recurrir a la rapidez en los
alimentos que no requieran demasiado tiempo para ser elaborados, ingresando
cada vez más al estilo Fast Food.
Los alimentos tipo chatarra que son
de fácil acceso para cualquier persona, con prisa, cualquiera de ellos puede
contener un alto nivel de azúcar, colorantes, sal, sodio y grasa, por mencionar
sólo algunos. Todo ello genera una mala salud en nuestro organismo ya que te
puede provocar enfermedades como obesidad, alto nivel de colesterol, glucosa,
diabetes e incluso algún tipo de cáncer.
Alimentos como papitas, refrescos, comida enlatada, dulces, gelatinas, cereales, pan de dulce, etc.
Pero, si México es un país que tiene una
riqueza cultural culinaria por qué nos está pasando que tengamos problemas
alimenticios? Bueno, para empezar son los malos hábitos que tenemos como principalmente
la higiene al momento de la elaboración de alimentos, el no querer (o no tener
para) comprar alimentos de buena calidad y sustituirlos con otros de mayor
alcance.
No estoy en contra de la comida chatarra,
sino del mal uso que se le da al incluirla como parte fundamental en la
alimentación, el no tener un balance saludable combinándolo con alimentos sanos
es el problema desde mi punto de vista. En mi papel de madre, es preocupante el cuidado de salud y alimentación para mi hijo cuidando lleve un lunch que le guste pero que no contenga alimentos chatarra, incluso no le ponemos jugo o refresco sino agua de sabor natural, por mencionar un ejemplo.
Tania menciona un ejemplo que llamó
mi atención:
“A los amantes de los pasteles, pan y galletas, consideren que la harina
de estos productos se les pone cierta dosis de aluminio, la cual también está
presente en la aspirina, antiácidos, la cerveza, la sal y los desodorantes. El
aluminio se ha encontrado en enfermos del Alzheimer.”
Estoy de acuerdo que al no tener
mucho tiempo y estar a las carreras con tus actividades diarias puedas cometer
el error de consumir alimentos chatarra en su mayoría sin embargo hay programas
en la radio, en televisión o revistas donde te dan consejos de prepararte
alimentos que te llegan a requerir incluso hasta un minuto de elaboración, comidas
o ensaladas saludables en 20 minutos, etc. por lo que insisto en que es cuestión de
buenos hábitos y de realmente querer tener un cambio en nuestra alimentación. Hacer caso de la tabla del buen comer, mejor dicho, saberla aplicar.
Les comenté que me apartaría un poco
del tema de la administración pero, aquí veo una oportunidad para comentarles
una experiencia: En mi trabajo, contamos con el servicio de comedor para los
tres turnos y todos los días de la semana. La empresa que presta estos
servicios tuvo un cambio radical en los últimos años y fue por el interés de
reducir el índice de obesidad que se tenía en la población de los colaboradores
ya que un estudio en el 2009 reflejó que el índice era del 85% de la población
con obesidad. Así que se contrató a una nutrióloga para que educara a esta
empresa en términos del buen comer de una manera balanceada. Contamos con
estudios anuales y se sabe qué porcentaje de los colaboradores tienen problemas
de Colesterol, Diabetes, Glucosa, Obesidad y los que están sanos, por ejemplo.
Así que realizaron una estructura en la manera de preparar alimentos así como
las cantidades de ciertos artículos que ahora utilizan.
- Antes, ocupaban 12 kilos de azúcar a la semana para endulzar el agua de sabor que ofrecían, ya fuera natural o artificial. Ahora, han reducido a 3 kilos de azúcar para la misma semana, ofreciendo sólo agua simple y de sabor natural por lo que aprovechando la misma azúcar que la fruta contiene, ya no es necesario poner tanta azúcar.
- Antes, se guisaba con aceite para freir alimentos como “tacos dorados” y ahora ocupan aceite vegetal o de tipo PAM, reduciendo también este nivel.
La comida que tenemos es muy basta
así que si dentro de la alimentación del día hay algo que no te guste o no te
haga bien por tu enfermedad, puedes solicitar cambios. Contamos con un tablero
de recomendaciones de los platillos del día dependiendo si tienes Colesterol,
Diabetes, Glucosa y Obesidad por lo que puedes elegir lo que comes. Para
concluir con mi ejemplo, debo decirles que se logró reducir el porcentaje de
obesidad, ahora tenemos un porcentaje del 70%.
Con esto concluyo mi tema, en que no
hay que espantarse de los altos contenidos que puedan tener alimentos enlatados
o chatarra, hay que espantarse si los consumes con mucha frecuencia en tu
alimentación diaria. Hay quien dice que “somos lo que comemos” así que a
cuidarse!!! Es por nuestro propio bien, nosotros podemos decidir qué alimentos
consumes y la frecuencia de los mismos así como el cuidado de quienes dependen de nosotros.
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